![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhSB5zfbWULXpLcsA8RabvGv8BHvH-0TjlS3Pptqc_sXYqpqIdqXs0GNGAfocY4E7VuzOWgBbRvIFPDSsABOf4P8mhNGZSR3xvuPwciTulfYJoD03E214exs8Zu1MBgfR0X7kuAUuuxV8mp/s400/ojonirico.jpg)
Ah, encontrarte en la vida onírica, sin las pesadas losas que te mantienen inmóvil y al acecho de una oportunidad como las que dejas escurrir a diario entre tus manos. Encontrarte sin ceños agrios, con la sonrisa abierta y la frente despejada, con los paisajes de un mundo inaccesible a los pasos ordinarios, a las actitudes que imponen las poses artificiales. Encontrarte y saber que siempre me has buscado, que por más que quieres no te has atrevido a sortear los falsos fosos que cavan las conjeturas delirantes. Ah, encontrarte cuando las voces aún son susurros, y beber de tu aliento justo antes de que el día todo lo apague…
2 comentarios:
Cuánto me alegra haber dado contigo, Rey mono..
Es el texto preciso para una noche que, por aquí, ya lo había apagado casi todo.
Un abrazo
:) Gracias
Publicar un comentario