Sé que desvío su atención de cosas inimaginablemente más importantes, pero aún así, me atrevo a invitar a todo el que pueda tener un poco de tiempo libre el próximo lunes a las inhóspitas 12:00 pm (ese instante crucial conocido también como mediodía), para que se decidan a ir a las Salas A y B de la Facultad de Filosofía y Letras, en Ciudad Universitaria, con el fin de recetarse algunas charlas cafeteras a propósito del entrañable Walter Benjamin.
Por supuesto, debo decir que habrá mucho tráfico en los pasillos de la facultad, olores y gente de todo tipo, y acaso varios experimentarán irresistibles deseos de estar en otro lugar más reconfortante y olvidarse de toda esa locura. Pero quizá valga la pena ausentarse un poco de la sencillez de la vida para escuchar acerca de una de las mentes más extravagantes que deambuló por las primeras décadas del siglo XX. Y si alguno de ustedes no vive en la Ciudad de México, o simplemente decide que no es verdad eso de la sencillez de la vida, tan sólo espero que me dediquen un parpadeo cuando lean estas líneas, lo cual entenderé como una señal de mudo asentimiento...
Por supuesto, debo decir que habrá mucho tráfico en los pasillos de la facultad, olores y gente de todo tipo, y acaso varios experimentarán irresistibles deseos de estar en otro lugar más reconfortante y olvidarse de toda esa locura. Pero quizá valga la pena ausentarse un poco de la sencillez de la vida para escuchar acerca de una de las mentes más extravagantes que deambuló por las primeras décadas del siglo XX. Y si alguno de ustedes no vive en la Ciudad de México, o simplemente decide que no es verdad eso de la sencillez de la vida, tan sólo espero que me dediquen un parpadeo cuando lean estas líneas, lo cual entenderé como una señal de mudo asentimiento...
5 comentarios:
Your Majesty!
Me disculpo por anticipado, pues, me temo, la sencillez de mi vida me imposibilitará de deleitarme con las charlas, aún cuando debo aceptar que nada me hubiera encantado más que percibir aquellos aromas de los pasillos, aquella congestión de transeúntes y reflexionar.
Le envío pues mi parpadeo. Ojalá sea posible en otra ocasión.
G.
Parpadeo recibido, George. Y las buenas vibras, si no te importa, las voy a envolver en una servilleta para guardarlas en el saco que lleve ese día. Saludos.
Caray, con lo interesante que resulta Benjamin!!, pero me tiene atrado el calor de Sonora.
No obstante te dejo un saludo y un abrazo.
Me parece, Víctor, que si llevaras un grabador lamentaríamos un poco menos no haber podido ir a la charla.
De todas maneras, mucha suerte el lunes.
Gracias por el saludo, Gab, y Gustavo, por desgracia no pude conseguir el artefacto grabador de sonido... Será para la otra.
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